Cosas, no sólo cosas, también personas. Personas que en un momento fueron importantes, o presenciaron algún momento importante de esos por los que al recordarlos tienes una sonrisa de oreja a oreja. Fueron esas personas las que compartían tu alegría con el mundo, esas personas eran las que si llorabas te consolaban, o viceversa. Siempre ahí, a tu lado con un abrazo que regalar, un abrazo que echas de menos.
"Si no me habla, yo tampoco voy a hablarle." Y así fue, como poco a poco, con mi amigo orgullo, que perdimos poco a poco aquella comunicación que había entre los dos.
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Como dijo aquel genio esta vida es un sueño..